El cine es un espacio de identificación, de educación, de industria y de arte. Y todo eso, está dentro de este blog.

martes, 26 de julio de 2011

Los Grandes del Cine: Octava Entrega “Quentin Tarantino”



El pie para esta entrega me lo dio la anterior. Cuando estaba investigando sobre Fincher encontré una entrevista a Tarantino en la que hablaba de lo mucho que le gustaba el cine de David, pero que al final del día él era mejor. Sí, claro, es egocéntrico, pero todos los genios lo son. Tarantino defiende el rol del director a partir de realizar sus propios guiones, de tener su propia voz y sus propias historias.

El concepto y la idea del cine de autor han sido cuestionadas desde que salió a la luz, pero de estar de acuerdo, creo que el sello de Quentin está presente en cada uno de sus films.

Nacido en Tennessee en 1963, fue nombrado después de un personaje de Burt Reynolds y sería esto lo que lo marcaría definitivamente. ¿Cómo resistirse a ser hijo de un músico y actor amateur y a ser nombrado por un hombre de la pantalla?

Luego de trabajar un tiempo como profesor de actuación y en un videoclub en Miami Beach, fue creando su comunidad y espacio sobre el cine y, al escribir para sus clases, fue adquiriendo el hábito y puliendo su estilo.

Cuando escribió “Reservoir Dogs” (Perros de la Calle), tuvo la suerte de que Lawrence Bender los leyera y entonces todo empezó a cambiar en la perspectiva de Quentin. Corría el año 1992 y ya esa estética de film casero y la poca variación de escenarios se nos quedaría grabada en la cabeza.

Se necesita mucho respeto para hablar de semejante film. Sin tener grandes despliegues de escenarios, sabemos que el robo ha sido frustrado porque hay un soplón en la banda. El tema es que hay que descubrirlo antes de que la policía los encuentre.

Estaba tan bien pensado el robo que ninguno de los miembros de la banda saben el nombre del otro, sino solo sus códigos del robo. De esta manera no podrían delatarse si la policía los atrapara pero por la forma en la que actuaron todos era obvio que la policía ya estaba enterada.

Desde su salida al mundo, la película se ha convertido en un film de culto y fue el Festival de Sundance el que le dio el vuelo merecido.

Después de esto, Quentin pudo vender otros guiones en los que había estado trabajando pero se guardaría para sí “Pulp Fiction” (Tiempos Violentos).

El film llegó al cine en 1994 y ha sido una de las obras más reconocidas del director. Tal vez porque ha significado resucitar carreras de actores largamente olvidados y por sus elocuentes discusiones, volvemos a meternos en el mundo del under con un gran toque de cultura popular.

Desde que arranca con una placa que te explica el nombre de la película, hasta que podemos discutir sobre una hamburguesa mientras citamos salmos, o que podemos bailar descalzos antes de una inyección de adrenalina al corazón sabemos que habrá un antes y un después, y sobre todo marcaría hitos. Basta poner los dedos en “V” y bailar con usándolos para bordear los ojos para evocarla.

Con grandes participaciones de las cuales mis favoritas son las de Samuel L Jackson y la de Christopher Walken, podemos ver matones, relojes de oro y concursos de baile. Es una película tan particular que no creo poder hacerle justicia en este breve estudio, por lo que dejaré en claro que por más que mi favorita es “Perros de la calle”, ésta película debe verse.

Jackie Brown llegaba en 1997 y luego del exitazo de la película anterior, no podíamos esperar que nuestro “objeto de estudio” siguiera en alzas (por más que estamos seguros de que su ego lo deseaba con toda su alma”). Si bien se aleja de sus entregas anteriores, este film demuestra que la educación en cine no necesariamente pasa por un aula y un título, sino por horas y horas invertidas en ver celuloide.

En un relato relajado y clásico, somos testigos de una adaptación literaria y con diálogos que respetan la estructura de la novela. Toma de ella el caso de la azafata que hace de correo pero termina siendo acusada de narcotráfico y de tráfico de armas y se va convirtiendo en un thriller.

Su monumento al animé llegaría en el 2003 con Uma Thurman vestida de amarillo y un sable japonés para terminar de cortar cabezas. Utilizando varios recursos típicos de este género como la música dramática y nostálgica y las introducciones al pasado ya sea por narraciones o por animaciones (impecable segmento en el que nos enteramos del pasado de O-Ren i Shi).

Otra vez se arriesgó con las elecciones ya que hay batallas en blanco y negro, un poco de morbo en todas las ironías y personajes que pueden estar cerca de la muerte en una toma y en la siguiente caminar erguidos. Sólo un genio pudo hacer que funcionara y Tarantino ha demostrado serlo.

La venganza estaría dada de a poco. Luego que viéramos a una mujer embarazada recibir un tiro en la cabeza, de saber que le escondían que su hija seguía viva y que una diosa de hielo vestida de motoquera pudiera batirse a duelo con 88 locos de remate, vemos como de a poco nuestro animé se convierte en un western y los tonos arenas, los paisajes elegidos, la distancia, el whisky y la melancolía nos arrastran al desierto y a morir entre escopetazos y víboras. Kill Bill Vol. II llegaba así a las salas de cine.

Otra vez dividida por capítulos, vamos hilando el pasado con el presente y sabemos que todo se une cuando se cumple la venganza.

En el 2005 participó junto a su amigo Robert Rodríguez en la dirección de una escena para la muy comentada “Sin City”. Respetando la estética del cómic al punto de creer que se está viendo la acción en un cuadrado con globos con los diálogos, el director se luce en una escena en la que la cabeza de uno habla con el otro. La verdad es que la interpretación de los actores no se pasa de buena pero la escena es de las mejores de la película.

En el 2007 llegaría la muy olvidable “Death Proof”. Este mediometraje de categoría z, está protagonizado por Kurt Russel y se trata de un hombre que asesina con un auto hecho para escenas de acción de las películas, de manera que protege al conductor por sobre todo. Si bien no usa máscara, tarda bastante en ser identificado.

El planteo pudo haber sido interesante, pero el guión no tiene sorpresas ni nada que se le parezca, por lo que termina siendo una película sin demasiada chispa.

Después de unos años así, algunos tuvimos la osadía de creer que su magia había terminado, que no importara lo que hiciera, ya no iba a encontrar la forma de volver a la cima. Y ahí fue cuando estrenó “Bastardos sin gloria”. Ésta idea de cómic mezclado con western cuenta la historia “no oficial” de la Segunda Guerra Mundial.

Tomando elementos de los dos géneros, tenemos a los outsiders del típico western que actúan en pos de la justicia con métodos fuera de ella, que no son reconocidos por ningún gobierno, ni ninguna sociedad y tienen esa actitud de hacer “lo que se tiene que hacer”. Por otro lado, del cómic respetan los estereotipos en los que el americano es el sureño que arrastra las palabras y bastante bruto, que el “malo” es el sádico intelectual frío y calculador y en el que la bella heroína es una femme fatale que está en Francia y, por ende, debe ser presentada con una boina de costado, una copa de vino, un libro y un cigarrillo…cosas que sólo hace funcionar Tarantino.

Hans es probablemente el “cazador de judíos” mejor construido del séptimo arte y Brad Pitt le da esos toques de comedia que realmente le da un toque distinto a la película.

Del western también respetan a la idea de venganza que prima en el atentado y en el concepto de que los cazadores de nazis terminan utilizando los mismos métodos para torturarlos. El símbolo de la marca también puede ser relacionado con ese género ya que suele utilizar al pasado como parte del presente, como una historia llena de fantasmas que uno siente pero nunca ve. No se explican los pasados, pero pesan en cada una de las acciones.

Actualmente se encuentra sumergido en el lejano oeste con un proyecto denominado “Django Unchained” (algo así como Django desencadenado) en la que con el estilo de western cuenta la historia de un hombre que tras haber sido liberado y haber recibido entrenamiento, decide ir a liberar a su mujer. Todos tenemos una idea de lo que esperamos de este relato: que vuelva a tener el dinamismo y la ironía de Quentin en cada uno de sus cuadros. Secretamente sospecho que ha elegido a serios actores para dejar de lado eso y hacer un relato denso, con toques personales pero que vuelva a ese esplendor de este género en el que la fotografía, la música y los silencios gritan historias.

Para todos los que esperan al viejo y amado Tarantino de siempre, ya ha anunciado la tercera entrega de Kill Bill en la que la hija de Vernita Green va en busca de Beatrix Kiddo.

Debajo, algo que no hago hace mucho, pero que siempre está bueno para resumir, y son las características del cine de Tarantino

Utilización del nonsense: extensos diálogos sobre temas irrelevantes.

Presentación de los personajes por partes, en caso hasta los divide por capítulos con placas.

Música difícil de encontrar, pocas veces usa lo popular. Busca acentuar la situación con música que muchas veces termina primando la escena, como el caso del silbido de Ellen cuando está vestida de enfermera en Kill Bill.

Extrema violencia pero lo hace retratado en ambientes under o que están fuera del foco típico con enfoques pop y formas de ironías que terminan haciendo una hipérbole de la violencia y es más “digerible” para el espectador porque no al ve como “seria”.

Presencia de perversiones en continuos diálogos sobre sexo, presencia de pedófilos, nombres sexuales en camionetas, conversación sobre “like a virgin”.

Elementos de ironización y satirización de la historia, de elementos de la cultura pop, del cine mismo.

Me gustaría que al terminar de leer esta nota piensen en Tarantino como un hombre en constante experimentación y búsqueda de estilos. Es un hombre que no ha estudiado cine, pero que lo entiende, lo ve y lo siente, por lo que no creo que sea razonable estereotiparlo en un tipo de cine. El cine de él…es de él.

4 comentarios:

  1. Tarde leo este artículo, pero más vale tarde que nunca. Soy súper fan de Quentin, para mí (digan lo que digan) es el más grande director. Y te digo que te salió brillante. Sólo quiero agregar unas preguntitas. PRIMERA: Porqué en todos sus films hay una escena desde el interior de un baúl de un coche ( indistintamente de lo que contenga) excepto en Bastardos sin gloria? SEGUNDA. Murió Elle Driver en Vol.2? Si vemos los créditos finales, los nombres de Lucy Liu, Vivica A. Fox, Michael Madsen y David Carradine aparecen tachados; mientras que al de Darryl Hannah se le superpone un gran signo de interrogación. Sabemos que quedó ciega y encerrada con la black mamba, pero no la vimos morir. Nos esperará una sorpresa en el Vol.3 ? TERCERO Y Último. Si alguien sabe que contiene el maletín en Pulp Fiction que me lo diga. Una vez escuché decir a Quentin en una entrevista que ese secreto se lo iba a llevar a la tumba.

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  2. jajaja Roque, qué bueno leerte por acá. Para mí lo que los más clásicos le reprochan es que hace continuos homenajes a otras obras. Yo, al contrario, creo que su genialidad está en re significar algo. Para darte un ejemplo, el uso de los espejos y el gran angular en la escena en la que John Travolta comprando drogas es calcado de Ciudadano Kane, lo cual para mí no le quita mérito, es sólo una observación.

    En cuanto a tus dudas, la primera me parece que se responde no desde el baúl si lo tomás como el contrapicado (desde abajo) al personaje. Si lo tomás así, cuando Brad Pitt hace la esvástica y lo felicita el otro soldado, puede ser perfectamente el mismo tipo de toma.

    La segunda, el signo de pregunta intenta justo plantearte esa duda, pero no, en la tercera se van a enfocar en la hija de B y Vernita, ya que se supone que la morocha va a buscar a Beatrix para vengarse, lo que hace que la línea que ella le dice cuando ve que fue testigo del asesinato de su madre, una premonición.

    La tercera, bueno, la verdad es que suelo pensar que la película se termina en la sala y no con los productores. Para ponerte un ejemplo, los productores de El Origen salieron a decir que el trompo se caía...lo cual a mí no me suma ni me resta..esa de hecho puede ser su lectura, mi lectura del final es otra (es, simplemente, que a Cobb ya no le importa si se cae o no, sino que esa es la realidad que él elige). Mi punto es que vos podés tener una lectura y yo otra y ambas son válidas. Lo que pensó Quentin es de él, pero el universo que creó sigue, amén de lo que hable ;).

    Un beso enorme y gracias por tu comentario!

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  3. Woww!! Aclaradas las dudas. Es verdad que da para mucho, como has dicho. cuando dije si Quentin no tendría preperada alguna sorpresa con respecto a Elle Driver, no me refería que vuelva a la acción como en el Vol.2, sinó de otro modo. Seguramente Beatrix enseñe el arte de luchar a B.B. Ahora, no podría ser Elle (ciega y todo) quien se las enseñe a Nikky? Sabemos que el universo loco de Tarantino da para todo. Por favor, soy un soñador, dejame con la ilusión de ver una vez más a la hermosa Darryl Hannah ( sin ojos igual es hermosa, ja) interpretando a la villana de su vida.

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  4. jajaja Me hiciste reír! Claro que si viene de nuevo Elle, la vamos a recibir con los brazos abiertos! todo es posible en el universo Tarantino!

    Tu posibilidad es bastante buena, la verdad...

    Un besno enorme

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