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miércoles, 2 de noviembre de 2011

Cine de Terror Religioso



Suelo pensar que antes del típico asesino, lo que más me asusta es lo sobrenatural. No es la capacidad de comprenderlo, es simplemente que soy terriblemente crédula y entro en todas esas fantasías. El religioso es una categoría aparte de ello y no debe olvidarse que la mayoría de los ritos suelen tener una dosis que es impresionante por sí misma: el vino se convierte en sangre y el pan en carne.

La religión siempre ha sido una parte importante del ser humano, que le permite interpretar lo que no comprende y establecer un orden básicamente sobre la premisa del temor al castigo. Por otro lado, es también el umbral entre la vida y la muerte, lo que le da esperanzas para no creer esfumarse después de dejar de respirar y es ésta delgada línea que cruzó la película de terror (convengamos que son bastante terroríficas en general, “La Pasión de Cristo” podría estar en el mismo nivel que “Hostel” en sangre y morbo pero como es histórica, nadie habla de ello) y se metió con lo más sagrado: el orden divino.


Por todo esto no es extraño pensar en el Diablo como el clásico malo de los films. De hecho, con el nacimiento del guión y Meliés (que también era mago y se vio fascinado por el tructo de sobreimpresión y del efecto que causaba) hizo varios cortos con diablos que eran más traviesos que perversos. No fue hasta 1922 donde realmente apareció el malvado más malvado de todos, de la mano de “La brujería a través de los tiempos”, film sueco donde empezaba a forjarse esa imagen despiadada de la Iglesia como institución.

1943 sería el año en el que se estrenaría “la Séptima Víctima”. Aquí el planteo viene por parte de una secta y relaciones entre una mujer que ha desaparecido, un médico, un poeta y una serie de locos que terminan planteando las bases para todas las ceremonias que después nos pondrían los pelos de punta en el cine.

En 1955 se estrena el drama “Marcellino pan y vino” que si bien no es exactamente terror, empieza a explorar esta cuestión de ritos e imágenes cuando ve la imagen de un Cristo crucificado y va a ofrecerle pan e intentar terminar con su sufrimiento. Empieza a aparecer esta idea del sacrificio, del dolor y de la culpa que tan presentes están en cada parte de la religión. El niño puede alucinar o no, pero fue una primera aproximación a una temática que permanecía prohibida.

El bebé de Rosemary (1968), de Polanski será uno de los primeros films que aborde definitivamente la idea del terror religioso. Con claras referencias a La séptima Víctima, la lógica de las sectas y demás, el verdadero truco narrativo de esta película sigue siendo la normalidad de la pareja (refuerza la idea de que puede pasarle a cualquiera) y que siempre está presente la duda de la paternidad del bebé.

El Exorcista llegaba en 1973 para ponernos los pelos de punta. Sigue siendo hoy una de las cintas de terror más evocadas y que más nos ha impresionado. Sin ahondar demasiado en golpes bajos, la fe es lo que tiembla frente a la crueldad de que una niña sea rehén de todo esto y de los ritos mismos de la religión que distan mucho de ser conciliadores, sino culposos. El mal aparece siempre como castigo, ¿Entonces por qué a una nenita? Siempre digo que el final amargo es una de las mejores cosas que tiene este film, del que nadie sale indiferente.


En 1976 La Profecía seguiría con esta línea. ¿Cómo hacerle creer a un padre que su hijo no es su hijo? ¿Cómo creer que un nene puede provocar todo esto? Quizá una de las mejores imágenes sea la de la niñera y el recorrido del chico por la galería mientras la madre arregla las flores. Un ángel malvado, definitivamente.

En 1999 llegaba “Estigma”. Ya con el inicio de la imagen de la virgen blanca llorando sangre nos introduce a lo que va a pasar. Otra vez tenemos a la chica que podría ser como cualquier hija de vecino que empieza a tener ataques inexplicables en los que le sangra la cabeza, los pies o las manos.

Así es como un investigador tiene que ir a atestiguar si es una manifestación de Dios, esa necesidad absurda de pruebas para la fe que necesita la institución están presentes en cada decisión del detective, por así decirlo, y en cada movimiento del entorno de una chica que no ha hecho nada para merecerlo. Digamos, es de creer o reventar.

El cuerpo se estrena en 2001 y claro, se trata del de Cristo. La película plantea que una arqueóloga descubre un cuerpo que asegura es el de Jesús por lo cual no habría podido subir a los cielos como dice la Biblia, en cuerpo y alma.

El hallazgo accidental, los intereses involucrados, las religiones envueltas, no paran de condimentar una historia que más que ser puro terror, empieza a llevar a una reflexión. Aquí hay un pequeño homenaje al Exorcista en cuanto el fin del cura y el sacrificio que hace frente a la religión.

El verdadero terror lo sienten los protagonistas, por lo que el film se termina convirtiendo en un drama de a poco.
  

El exorcismo de Emily Rose llega en el 2005. Si bien vuelve a tocar el tema del exorcismo, lo que es interesante es que ya sabemos el final de la protagonista y que todo el film se estructura en un juicio para saber si el cura hizo una mala praxis o no. Considerando que la chica era una católica devota, el cura simplemente creyó que estaba teniendo algún delirio místico que si ella encontraba la salida con la fe, estaría bien.

Así es como se presentan los casos uno a uno, las pruebas y las contrapruebas se intentará determinar si requería ayuda médica o si el ritual no había sido bien aplicado. En los flashbacks veremos a la “poseída” en sus peores accesos. A mi gusto, el final abierto podría haber sido más interesante, al estilo de Rosemary y su bebé, pero bueno, ésta cierra.

La reunión del diablo es un film del 2010 del gran M Night. Yo lo adoro y sé que estoy medio que sola ya que la gente que se va a ver sus films siempre espera ver Sexto Sentido. Sea como fuere, el film en cuestión nos presenta a cinco desconocidos en un ascensor que se queda parado, de los cuales uno es el diablo.

La genialidad está en presentar los pasados de los personajes en los que cada uno tiene una parte oscura, que cada vez que se apaga la luz vemos como el resto empieza a revolverse y las cosas se suceden sin dejar mucho aire al espectador. ¿Les dije ya que me gusta mucho el director?

El rito se estrenó este año. De nuevo nos encontramos con el exorcismo, pero esta vez es un curso y es para convencer a un curita a que se sume… bue, la verdad es que no me sumó mucho.

Buscando de este subgénero me di cuenta de que no hay tantos films y las temáticas se repiten y siempre sobre la religión católica. Sin embargo, son los que la gente más recuerda como de terror cuando la mayoría se van convirtiendo en dramas hacia la mitad. ¿Algunas sugerencias de por qué será esto? Soy toda ojos.

4 comentarios:

  1. Me gustaba el género y desde chico me pasaba días enteros viendo cintas de terror de dudosa calidad. Hasta que en cierto momento, como vos decís, tanta repetición tópica me cansó y mudé mi preferencia. Creo en la repetición a la que hacés referencia.
    Mas allá de eso, veo este tipo de cine y poco sorprende en estos días (salí de ver "11 11 11" recien y era para colgar a mi respetado Darren Lynn Bousman por el bodrio que filmó)lo cual desilusiona mucho como público...
    Ah, te cuento que Shyalaman no dirigió "La reunión del Diablo", sólo la produjo. Lee este post que te aclara el tema (de mi viejo blog...): http://elespectadorweb.livejournal.com/4620.html
    Saludetes!

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  2. El subgenero de "terror religioso" es de los que mas me gusta dentro del genero de terror. Y como tu disfruto de lo sobrenatural, porque tambien me lo creo. La mejor del genero es sin duda The exorcist, nada como ese film junto a The omen.
    Saludos.

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  3. A mi es que no me gusta el genero Terror ni nigún subgénero, a no ser que sea comedia, tipo "Shaun of the dead" o similares. Me quedé en la trilogía Evil dead, que es de mi época, luego dejó de interesarme el terror, hasta que volvi a reconciliarme con él a través del cine Japonés, pero volví a cansarme. Por lo tanto no soy un gran consumidor, pero creo que tu post está muy bien. Desconocía ese subgénero Religioso. La verdad es que esto de géneros y subgéneros es un mundo.

    Un saludo
    Roy

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  4. Hola chicos, qué lindo que estén por acá! siempre me suman un montón. Rodrigo, gracias por corregirme el error y por eso me gustan los comentarios: la entrada se mejora entre todos. Sí, hay una repetición en la narrativa pero sigue funcionando y siempre me llama la atención lo mucho que sensibiliza este tema...será por eso que los siguen haciendo?
    Daniel, soy una cobarde absoluta! de hecho me funciona más la musiquita que me avisa que algo anda por ahí que el hecho de verlo. Supongo que es el tema de la sensibilidad ante la religión y sus rituales los que siempre me hacen sentir un poco más vulnerable con eso.
    Roy, tuve que haber aclarado que el subgénero es un gusto personal...como casi todos, en realidad, jajaja en este caso, invención mía... se notó mucho, no?
    Saludos a los tres y muchas gracias por sus comentarios

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