Basándose en la idea de lo poderosa
que es la mente y de cómo puede crear ambientes, situaciones y engañarse a sí
misma, Cobb, su personaje principal se dedica a extraer ideas de la mente de
las personas a través de un sueño conjunto, donde al soñador todo le parece
real y no siempre sabe defenderse.
Cuando se le encarga una tarea, que es
original una idea en el subconsciente, Cobb no puede rechazarla ante la
posibilidad de volver a su país y con sus hijos, después de estar prófugo hace
ya bastante tiempo.
Frente al espectador se desarrollan
una serie de niveles de sueño, el caos, los inesperados, las muletillas
visuales (acciones que se repiten para completarse después que sirven como
puente para ubicar al espectador), los efectos especiales y un gran casting
completan el relato.
Es una narración compleja con
flashbacks dentro de flashbacks, con empezar la historia por el final y con
tres niveles de sueños, nos encontramos en esta historia llena de sutilezas en
lo visual (como un físico que sigue siendo un actor pero su reflejo en el
espejo muestra otra) y una excesiva y perfecta Mal (Marion Cotillard) que es la
mejor proyección sobre recuerdos que Cobb podría tener.
Es uno de los films más originales que
vi en mucho tiempo y con un gran final (para nada abierto si me preguntan a mí)
que vale la pena ver. Aunque sea sólo por Leonardo DiCaprio, Joseph Gordon
Levitt y Ken Watanabe.
Estamos de acuerdo contigo, de los guiones más originales del cine reciente y para nada tiene un final abierto (claramente se ve al final como acaba, pese al efecto tramposo del tótem en el último plano).
ResponderEliminarEL QUE NO VIO LA PELI QUE NO LEA ESTE COMENTARIO!!!!!
ResponderEliminarjajaja bueno, hay que tener en cuenta que como espectadores cuesta mucho desprendernos de la idea del film relatado desde el punto de vista omnisciente, como si debiéramos comprender todo el universo. La construcción del personaje es lo primordial acá: lo importante no es si se cae o no, lo importante es q a Cobb ya no le importa. En la construcción del personaje hay un claro cierre y es eso lo que el espectador debe ver, porque como seres humanos (o, en este caso, personajes) no comprendemos el mundo, sino aspectos. Me pareció un guiño interesante y desde Memento que esta dupla ha demostrado (guionista y director) que pueden abrir historias de lo más descabelladas y cerrarlas de una forma impecable.
Un beso grande y gracias por tu comentario