El cine es un espacio de identificación, de educación, de industria y de arte. Y todo eso, está dentro de este blog.

viernes, 7 de febrero de 2014

Historias de Buenos Aires 11: Los libros que van y vuelven

Como todos los viernes, es el día en el que una anécdota se relaciona con una película. Y es que para nosotros los cinéfilos, el mundo se mira a través de un film.

Hace ya varios años somos amigos y aún así, él llega a sorprenderme todos lo días que los veo. Creador de la guía del buen viajero de transporte público que incluye manta en invierno y botella con hielo y agua dentro en verano (que se usa de almohada así no llega transpirado a destino), este hombre está lleno de teorías y tiene la amabilidad suficiente para compartirlas.


Un día, cuando él recién vino a vivir a Buenos Aires, estábamos hablando sobre libros y ambos contamos nuestro terrible destino con Tolkien: yo presté los tres de los que sólo me devolvieron uno y él prestó los tres y le devolvieron dos. Yo perdí La comunidad del anillo y El retorno del Rey y él las Dos Torres. Después de filosofar sobre que en realidad el error fue nuestro y que los libros no deben prestarse, en una de las visitas a mis padres, vi el libro y se lo traje. Como él no estaba en su casa cuando lo dejé, quedó sobre la mesa del comedor.

Días más tarde le pregunto si recibió el libro dado el silencio de radio sobre el asunto y la respuesta de Pandu fue: "¡Ah! Fuiste vos. Yo pensé que el karma me había devuelto el libro". Amén de las pocas actividades que tiene que tener el Karma para encargarse de los libros de él, la respuesta, convengamos, carece de toda lógica. Pero por eso nos queremos tanto: ninguno de los dos es normal.


Toda esta charla sobre los libros, me trae a colación a la película favorita de mi mamá "África Mía". En las primeras secuencias, el personaje principal encuentra una biblioteca y, extasiada, no escucha que alguien más entra. Cuando pregunta si el propietario de los mismos los presta, su interlocutor cuenta: "Una vez Dennys le prestó unos libros a alguien. Pasó el tiempo y no se los devolvió. Yo le dije "no irás a perder a un amigo por unos libros" y él me respondió "No, yo no perdería un amigo por unos libros, pero él acaba de hacerlo".

Mientras Pandu y yo ya tenemos nuestros libros ¿Qué historias tienen prestando libros? ¿Qué piensan de África Mía? Buen fin de semana.

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