El cine es un espacio de identificación, de educación, de industria y de arte. Y todo eso, está dentro de este blog.

sábado, 9 de enero de 2016

Carrie, de Brian De Palma


Tengo que confesar que el llamado "Nuevo cine americano" es uno de mis favoritos. Muchas veces con fundamentos lógicos y muchas otras simplemente porque es el cine con el que crecí y el que me conozco de memoria. Ahí donde muchos miden el cine por el cine clásico (que lo descubrí de más grande), mi cine base es éste. De Palma es uno de los cinco directores que más vuelo le dio a este movimiento que se basa en una estructura clásica de relato con algunas pinceladas (sobre todo en la historia) de elementos posmodernos. Se ven algunos sellos de intertextualidad, algunas combinaciones de elementos que ya lo hacen un cine vistoso sin necesidad de acudir a todos los otros efectos que se ven hoy en día.

Carrie está basada en la novela homónima del gran Stephen King. Con esto vale aclarar que jamás nada de lo que se adapte de su mente provocará el mismo efecto (todos los que hayan leído "El resplandor" e "IT" estarán asintiendo frente a la pantalla mientras me lean), pero el resultado conserva lo que yo llamo el espíritu de la historia. Con espíritu me refiero a la esencia en cuanto al giro del personaje, a la dualidad del mismo y el ambiente que la asfixia mientras ella está bajo la presión de no saber qué hacer, hacen que sea de las más dignas transformaciones de un libro de King a la pantalla grande.


Todos sabemos que Carrie es una chica que tiene telequinesis. Sí, mueve las cosas con la mente, pero eso es lo de menos. Lo que hace que nosotros sintamos pena y un poco de pánico es que es una chica maltratada en el colegio, con un mundo que le resulta hostil, no es linda, es aniñada y un poco fantasiosa y tiene una madre con un profundo delirio místico que no le permite ni ser sincera con su hija ni ayudarla en nada. Lindo combo ¿Eh? Cuestión que logra lo increíble: por momentos pensamos realmente si Carrie es un monstruo o lo es todo el mundo que la rodea y es que si sacamos el poder, hasta entenderíamos que ponga una bomba en el colegio. 

De Palma usa estos elementos para saber cómo presentarnos la historia sin perder un poco de esta pena y ese pánico. Carrie se está bañando cuando la conocemos, completamente desnuda y ya tiene su primer encuentro con la sangre. En las primeras secuencias si está sola, la cámara constantemente la busca en picados, contra picados o alturas de cámara bajas que nos muestran lo extraño que se viene, inclusive mucho antes de que ella lo descubra. 


Una maravillosa música (para mí es el 70% de una cinta de terror), terminan de construir este cuento agridulce con una madre más aterradora imposible. Inolvidable.

No hay comentarios:

Publicar un comentario