El cine es un espacio de identificación, de educación, de industria y de arte. Y todo eso, está dentro de este blog.

miércoles, 6 de abril de 2016

10 pasos para viajar en el tiempo según el cine

Las fórmulas son la base de cualquier género y dentro de la Ciencia Ficción, conversando con la Aventura o la Fantasía, siempre repite algunos estadíos. El espectador de género no se molesta por esto, al contrario, lo espera. Y como buena espectadora de cine de género, a mí me gusta reírme de esas conseciones que uno hace en la oscuridad de la sala que no haría en ningún otro lugar.

¿Cinturones ajustados? Aquí vamos

1) La curiosidad solo mató al gato


La base para viajar en el tiempo es saber que se puede viajar en el tiempo. Es el deseo más anhelado de poder manejar el mundo como si se tratara de un titiritero: se arreglan los errores y se desarreglan los aciertos. El ejercicio de poder, el desafío personal, es lo que cada vez mueve al científico. 

2) Visualizando el destino: un pasito pa adelante, un pasito pa atrás


Como todos sabemos el tiempo no es lineal. De esta manera se explican las consecuencias y las reacciones y con eso queda claro que uno puede viajar en cualquier dirección. Para esto, tenés que visualizar en qué momento querés estar: ya sea el lejano oeste o cuandos seas más grande y se te vayan los mambos actuales.

3) Personaje catalizador que explica la teoría en la que se apoyan para viajar en el tiempo


Si bien la ciencia ficción puede ser dura o blanda, la verdad es que necesitás anclar al espectador en ese universo que estás planteando y para eso hay un personaje en el film que tiene que explicar la razón por la cual se puede viajar en el tiempo. 

4) Vamos de paseo: fabricante, consumidor o transeunte


Esto es porque hay distintas formas de llegar a la máquina: o porque el personaje principal lo fabrica, o porque la fabrican y él se encuentra con la posibilidad de hacerlo o porque se cruza con ella accidentalmente y no queda otra que remarla. 

5) No toques nada, peeeeero


Se mira y no se toca. Todo tiene consecuencia en el mundo "real" porque se desordena directamente. Sos casi que un espía que puede destruir su existencia en segundos. Nadie puede tolerar ese tipo de presión. 

6) Gataflorismo: en realidad estaba bien allá


Después de pasar por una primera etapa de fascinación, inevitablemente viene la reflexión sobre lo lindo de la casa. "Ya no estamos en Kansas" es una frase llena de promesas y llena de angustias también.

7) Cara a cara con tu árbol genealógico


Si no hay parientes, no hay negocio. Es necesario que te cruces o con un tatara nieto o con tu tarara abuelo para que te sirva de referencia en un mundo nuevo. 

8) Por un pelo


La vuelta siempre es reñida. Si empezar el viaje era sencillo y después se complica, si bien el personaje quiere volver a casa, se encuentra tironeado e imposibilitado a irse rápidamente. 

9) Exactamente como antes. Bueno, más o menos


Las consecuencias quedan a la vista y hay una pista de que ese viaje sucedió que se le muestra al espectador como un guiño sin que los demás reparen en eso. El personaje se encuentra con un nuevo panorama. Eso también funciona como metáfora del cambio interno que hizo. 

10) Abrazar fuerte al ser amado que, como volviste un ratito después de lo que te fuiste, ni se enteró que no estabas. 


Esto es clave: aprendiste que tu vida no es una basura y que hay seres importantes de verdad en ella. Entonces tenés que tener una reacción exagerada para demostrarlo. Es crucial. 

¿Están listos para viajar en el tiempo? ¿Qué pasos agregarían? 

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