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miércoles, 1 de agosto de 2012

Duplas inolvidables actor-director. Entrega X: Ridley Scott – Russell Crowe



Ridley Scott es uno de mis directores favoritos. Cada vez que veo su filmografía me pregunto qué le hace falta, porque no ha dejado estilo ni género por explorar. Me gusta cómo combina pequeñas pizcas personales con el cine comercial, demostrando que si el que está atrás de cámara sabe combinar bien los recursos, entretenimiento y bueno no tienen por qué ser antónimos.

Russell Crowe llegó para quedarse. Con el perfil rudo que compraron los hombres y el que adoran las mujeres, ha ido explorando todo tipo de papeles. Algunos le van mejores que otros.
Juntos, actor y director han hecho cinco films. No todos son mis favoritos, hay un par de inolvidables y uno medio inexplicable, para mí. De todas maneras, es una dupla que nos ha traído grandes momentos en 35 mm y no me sentiría bien conmigo misma si no los trajera hoy acá.


La primera película que hicieron juntos fue Gladiador en el 2000. No hay mucho que contarles ya que todos la deben haber visto, pero en un monumental despliegue hay maquetas que reconstruyen el Coliseo Romano, el Circo y toda esa vida en la Era de Marcos Aurelio.

En la película, Crowe interpreta a Maximus, un general traicionado por el hijo de u emperador que no gustaba demasiado del favoritismo de su padre y de su hermana por él.

Maximus aparece como el hombre que no tiene nada que perder, que renace desde lo más profundo para saber dónde asestar el golpe al sistema y a un regente ilegítimo. A diferencia de muchos otros que han planteado jaques, a él no le interesa quedarse con el control, si no simplemente que Roma no siga en manos de un hombre tan tortuoso como Commodus.


Un buen año del 2006 fue el segundo trabajo que hicieron juntos. La comedia es liviana a más no poder, pero me gusta la idea de que ni él ni ella son gallardos y perfectos. Él es un tipo bastante desagradable, que cree que puede separar y vender todo por no haberse involucrado nunca con nada. La verdad es que ni siquiera ha terminado de leer su libro favorito.

El desapego a lo material, también se lleva a lo afectivo y entonces es volver a ese lugar de cuando era niño y conectarse con el único ser que realmente quiso y ya no está. La casa empieza a poblarse de gente, como una metáfora de su vida. Se aleja un poco de los cánones de las películas de su género y creo que eso es lo que más me gusta de ella.

Crowe logra hacer una interpretación en la que puede parecer un ser humano, ser gracioso, desagradable, todo lo que lo aleja de la perfección a la que nos tiene acostumbrados. Es bueno saberlo…él tampoco es perfecto.


American gángster del 2007 lo pondría junto a Denzel Washington. Me gustó mucho la dinámica entre ellos dos porque considero que ninguno cede un milímetro de pantalla al otro, entonces es como un duelo constante.

La ambientación que eligió Scott nos lleva a una ciudad oscura y el espectador cree que puede albergar a cuanto delincuente juren que tiene. A los ojos de Crowe aparece esa figura por la que todos se sentirían atraídos: el gangster que es un narcotraficante pero resulta que tiene una escala de valores tan altos que no estás seguro hasta qué punto es tan sucio lo que hace. Pero Crowe es un policía que prefiere ser pobre a corrupto (lo que lo deja un poco solo en ese lugar) y para el que la honestidad es crucial para sobrevivir. Lo mejor de todo es que su vida privada es un desastre…o sea que todo lo bueno, se lo deja a la ciudad.

Para verla muchas veces, a pesar de su duración. Para mí, uno de los clásicos de su género.


Red de mentiras del 2008 lo uniría a Leonardo DiCaprio en este film de espías. Recuerdo que cuando vi el tráiler pensé que Leonardo estaba queriendo revivir su rol en Diamante de Sangre (el mejor de él, a mi criterio) a ver si lo volvían a nominar. La película, claramente, poco tiene que ver con la anterior pero la situación desesperada del personaje es fácil de relacionar.

Russell Crowe, sin embargo, interpreta a la otra cara: es un espía de escritorio y arma y desarma la vida del otro como si fuera una marioneta. Todos reaccionan según sus hilos. Así es como puede aparecer en la casa del otro sin problemas y crear la situación que crea conveniente. Como tal, su personaje es un pedante y termina atropellando al resto. Cuando se encuentra con Mark Strong y cómo él se maneja con respeto, el tipo pide lo que quiere, lo mira desafiante mientras se le ríe y sabe que va a salir inmune de todo lo que haga. Me encanta su interpretación, nada le importa porque no es el que pierde.


Robin Hood del 2010 los vuelve a juntar.  Honestamente, tuve algunos problemas con esta versión. Para empezar, el simple hecho de verlo en mayitas ya no funcionaba, para seguir es una adaptación absolutamente diferente a lo que uno acostumbra a ver de esta historia y por momentos hace ruido, pero defiendo a muerte las adaptaciones como visiones y posturas sobre un texto.

El tema es que el planteo nos muestra una crisis y una opresión que después no nos deja refugiarnos en lo esplendoroso del bosque. No, acá hay traición y una Era oscura en la que los grandes hombres mueren y los miserables gobiernan.

La construcción de Crowe es más de lo mismo. Tampoco me suma en su química con Cate Blanchet, si es que la hubo en algún momento. Es el tipo rígido, sufrido, callado o sea que la película se inclina más a hacer un enfoque humano que de aventuras.

Claro que siendo de Ridley Scott (a quien adoro) las escenas de batallas están muy bien planteadas pero tal vez demasiado cerca del “apto para toda la familia”. Un estilo con el que no se siente cómo y salta a la vista.

La idea de que es Robin no Robin funciona, a mi criterio, solo para justificarme la edad del personaje y el hecho de que nadie lo reconozca ni delate. Pero le faltaba algo más.

Siempre me da algo de tristeza cuando empiezan tan bien y el último trabajo te deja este sabor. Sigo pensando que sir Ridley es uno de los mejores directores que he visto y que muchos de hoy en día quieren seguir sus pasos. Veo mucho de él en Nolan, en Wright inclusive. Creo que es un tipo con un legado enorme y mientras esté detrás de cámara y se entienda tan bien con un tipo que a lo mejor no es tan versátil pero tiene esa increíble presencia en pantalla…siempre quedan grandes cosas por esperar.

¿Cuál es tu favorita de esta dupla? 

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